Ciudadano en la sociedad digital

En el debate referido al Webinar #CDigital_INTEF, más que diferentes ideas percibo diferentes formas de sentir; me imagino que relacionado con sus prácticas, experiencias y vivencias de cada uno de los participantes; creo que expresan las diferentes maneras en que se pueden trabajar y formar la competencia digital.

A mi parecer las ideas más impactantes han sido las de poner emoción a la Web 2.0 y las de desarrollar la competencia digital sin utilizar equipos electro-digitales. Sin dejar de ser importante el enunciado sobre el peligro de la sociedad de consumo de estos tipos de artefactos y la afirmación sobre la acción conjunta que deben realizar la comunidad docente para obtener resultados efectivos.

Considerar la competencia digital como un proceso de alfabetización creo que es pertinente, y así como en antaño el analfabetismo significaba no tener acceso a los libros y con ello a la educación, hoy en día no disponer de la Web 2.0 es no tener acceso a conocimientos científicos medianamente actualizados y no poder manejar los diferentes formatos para transmitir, procesar y desarrollar las ideas. En ambos casos no proveer de los recursos para alfabetizar es polarizar la distribución de la riqueza.

Ser un ciudadano en la sociedad digital o un residente del siglo XXI es ser un ciudadano cosmopolita, interesado en el desarrollo de la humanidad y en la conservación del medio ambiente, que comparte sus saberes, creaciones, emociones e ideales, con una comunidad sin fronteras, facilitado por una red social basado en la Web 2.0

La interacción social puede verse enriquecida o empobrecida con las TIC. Por una parte permite contactar con una mayor variedad y cantidad de personas, y acceder a múltiples fuentes de información; pero también es posible el ensimismamiento del ser humano mediante artefactos digitales que lo aísla de sus semejantes; por ello, ante la diversidad de estímulos, de mediadores y de condicionantes, conscientes e inconscientes, es fundamental la educación para lograr ser una persona, libre, autónoma y participativa.

La pregunta para los ciudadanos de los países atrasados y los países emergentes es: ¿la tecnología crea brechas?, ¿puede acercarnos o alejarnos a nuevos conocimientos?